19 de junio de 2010

LA DEMOCRACIA NO PUEDE CONVIVIR CON REPRESORES

Quienes tenemos la responsabilidad de conducir una institución educativa no podemos mantenernos en silencio frente a la brutal actuación de la Policía de la Provincia de Río Negro en Bariloche. Las sociedades y los gobiernos se evalúan según como tratan a sus ciudadanos, especialmente a los más débiles y a quienes constituyen su futuro: los jóvenes. Nada justifica la muerte,  menos aún que ella irrumpa por la acción del estado que debería tener como horizonte permanente la promoción y protección de la vida. No puede alegarse la simplista y perversa división de las personas en gobernantes y gobernados, ciudadanos y delincuentes, ricos y pobres. Esas dicotomías mentales e ideológicas configuran los dramas que padecemos: cientos de víctimas de la violencia irracional del poder y su periferia.
La democracia es incompatible con la represión y la muerte. Duele recordar que en esta provincia se inauguró el gobierno elegido por el pueblo en 1983 levantando un programa de lucha contra el autoritarismo y, veintisiete años después, esa batalla la esté ganando una cultura cada vez menos pluralista y tolerante frente al débil, el pobre y el diferente.
Las autoridades del Centro Universitario Regional Zona Atlántica de la Universidad Nacional del Comahue reclaman  el fin inmediato de la represión en Bariloche, que los funcionarios responsables sean removidos y la justicia actúe en forma inmediata para juzgarlos. Es necesario iniciar un proceso de reflexión y un programa de acción acerca de la concepción del ejercicio del gobierno y del poder que nos permita retomar los principios fundadores de una democracia inclusiva, como universitarios nos ponemos a la cabeza de esta tarea y convocamos a todos los ciudadanos de bien que quieran acompañarnos.
 
Viedma, 19 de junio de 2010
 
Osvaldo Alonso
Decano
Centro Univeristario Regional Zona Atlántica